De Santiago a Mendoza en 24h

Por Benjamin Mena

Impulsado por el irrefrenable deseo de comer las exquisitas facturas argentinas (pasteles dulces), partí pedaleando desde Santiago un viernes a las 11 de la noche con destino a Mendoza.

Subiendo la cuesta Chacabuco.

Con las primeras subidas ya muy conocidas por mi, mi bici y mis piernas, fue todo muy cómodo: gran vía, pie andino, alrededores de colina. Después de un corto tramo de carretera (ruta 5), se aproxima la cuesta Chacabuco: 13km de cuesta, que he hecho varias veces, pero nunca a las 3 de la mañana y sabiendo que aún me queda todo un día de pedaleo y una cordillera por cruzar.

Santiago y Mendoza están a sólo 360 Km de distancia, pero es necesario atravesar la monumental cordillera de los andes.

Pedaleando siempre tranquilo, ya estoy en Los Andes, y empiezo a ver movimiento de gente no de fiesta, si no camino al trabajo.

Empiezo a ir hacia la cuesta caracoles, intentando siempre estar orillado por los camiones y autos, que entiendo perfectamente que me odien, mientras no me atropellen todo bien.

Ya en portillos, me queda la última patita hasta la aduana argentina. Claramente deshidratado y un poco más lento de lo que me gustaría, sigo subiendo hasta los 3200 msnm.

En la aduana, para cruzar en bicicleta, recomiendo DECLARAR TU BICI. Yo tuve que insistir porque en un principio me dijeron no era necesario. Pero a veces, a la vuelta podrían cobrarte impuestos de importación, así que para envitarte ese mal rato, mejor haz el trámite.

Comienza la parte de la ruta que es mayoritariamente bajada y plano, pero desde siempre supe de lo que se venía: VIENTO.

Calles sin berma, curvas, hoyos y mucho tránsito, acompañadas de viento que desestabilizan la bici, sobre todo con bolsos que actúan como vela, lejos lo más peligroso del viaje.

Ya solo queda apretar los dientes y pedalear. Si no pedaleas en el plano, te vas hacia atrás, en la bajada, no bajas.

Con solo 70km restantes (de 370) y casi solo bajada, la ruta está totalmente cerrada. Un camión se volcó e intentan sacarlo. El taco sigue creciendo, y ya son más de 8km de fila de autos con motor apagada hacia cada lado del accidente.

Tras preguntar si podía pasar caminando por la carretera, y recibir una negación rotunda, me abrigue lo más que pude y senté bajo una señaletica.
Después de más de 1 hora, llega mi salvación: un grupo de motociclistas argentinos, que sin dudarlo, tomaron mi bicicleta y me  ayudaron a vadear el accidente por arriba del cerro y completamente a oscuras. Si no fuera por ellos, hubiese tenido que esperar 5 horas más, probablemente sin ganas de terminar la travesía. Ya oscuro y con las calles aún cerradas, bajé lo más rápido que pude, solo quería llegar. Ya en Mendoza, con un gusto agridulce entre cansado y enojado por “el tiempo perdido” en la ruta cortada, logré llegar a la plaza de la independencia en Mendoza tras 24horas y 39 minutos.

Fotografías por Vicente Llanos y Valeria Correa

Mini documental disponible en Youtube
Resumen de 2 minutos, de las 24 horas de travesía

Los bolsos que Benjamin usó en esta travesía:

  • TTLong arriba del tubo superior, para llevar geles, snacks y batería de la linterna.
  • FrameBag R31 en el marco, para llevar más comida, herramientas, bombín cámaras de repuesto, telefoto y billetera.
  • Seatbag micro atrás del asiento, para llevar ropa de abrigo, cortavientos y reflectante.

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